Son muchos los retos que enfrentamos día a día para hacer dominar nuestro presupuesto y rendir nuestro dinero. Esta tarea no sólo parece imposible sino que además puede generar un estrés gigantesco, frustración, desesperanza y afectar relaciones sólo por mencionar algunos de los efectos que la administración del dinero supone en una economía tan hostil.
Si a eso le sumamos que, en general, no tenemos una orientación formal acerca de cómo llevar este control, que es posible que nos acompañen paradigmas que saboteen nuestro bienestar financiero y que lo que sabemos acerca de las finanzas personales es aprendido por ensayo y error tenemos el caldo de cultivo perfecto para el caos financiero.
Además existen otras razones por las que puedes estar en dificultades que mencionamos a continuación:
- Administrar pobremente el dinero / padecer de déficit de atención financiera.
- No conocer a los “ladrones de tu dinero” -incluyéndote a ti mismo.
- Fugas originadas por negligencia propia o de otros.
- Gastos hormiga -pequeños gastos que se comen todo tu ingreso.
- No tener una meta financiera a corto y largo plazo.
- Gastar dinero -como resultado de la presión social- en cosas que no son importantes para ti.
- No generar suficientes ingresos.
- No poseer varias fuentes de ingresos.
- No ahorrar durante las “vacas gordas” para prepararte para las “vacas flacas”.
- Baja o nula intención de aprender y formarte acerca del tema.
Las 4 reglas para dominar tu presupuesto
Existen mecanismos, prácticas, aplicaciones y herramientas que están a tu disposición para enfrentar estos desafíos y reconfigurar la forma en que gestionas tu dinero.
Si dedicas tanto esfuerzo para ganar dinero mes a mes, al menos sé tú quien tenga el control, conoce de dónde viene y hacia dónde va tu dinero domina tu presupuesto con esta cuatro reglas que te ayudarán a lograrlo.
REGLA #1 Conoce tu comportamiento.
Lo que no se mide no se puede mejorar. Por eso es necesario conocer de dónde y hacia dónde se dirige tu dinero. Registra organizadamente el uso que das a tu dinero todos los días durante al menos uno a tres meses. Esto te ayudará a ser más consciente de tu comportamiento de gastos y a identificar las áreas de oportunidad.
- Descarga una aplicación de registro de gastos.
- Durante al menos un mes registra cada gasto que realices.
- Reflexiona acerca de tu comportamiento y los gastos realizados.
REGLA #2 Sé el jefe de tu dinero y asígnale un trabajo a cada centavo que generes.
Ya que tienes una mejor idea de hacia dónde va tu dinero, ahora comienza a dirigirlo.
Tan pronto como recibas dinero, decide qué debe hacer (lo que sea más importante para ti). Luego, en lugar de comprar algo en función de tu estado de ánimo, o la cantidad de dinero en su cuenta,lo harás basándose en un plan que fue creaste tú mismo, al dominar tus finanzas:
- Identifica tus fuentes de ingresos, su cantidad y frecuencia.
- Inmediatamente, al recibirlos asígnale una tarea de acuerdo a tus prioridades.
- Sigue tu plan.
REGLA #3 Anticípate.
Que el dinero sea tu última preocupación. ¿Se daño el carro? No es gran cosa. ¿Vienen las vacaciones? Tienes un montón de dinero disponible porque sabes dominar tu presupuesto¿Se daño la nevera? Tienes de más para repararla o comprar una nueva.
Imagina que la llegada de estas situaciones no represente angustia para tí. Anticípate y aparta una porción cada mes para estos propósitos.
- Identifica un gasto grande pero poco frecuente.
- Crea una meta mensual para cubrirlo.
- Cuando el momento llegue (se descomponga el carro, se rompa la tubería…), simplemente paga. sin contratiempos.
REGLA #4 Sé flexible
Las circunstancias cambian y los planes cambian con ellas. Tu presupuesto no es diferente. Si gasta de más en una categoría, libere dinero de otra categoría y avanza. ¡Recuerda, tú eres el jefe!
Esta forma de adaptarse a los cambios te hará más consciente ya que te obliga a negociar contigo mismo para decidir de dónde se tomará el dinero cuando una categoría de gastos sobrepasa lo estimado.
Aunque que durante la adaptación a esta forma de manejar las finanzas personales existan dificultades, esta es una práctica agradecida, aplicándolos relativamente bien obtendrás resultados significativos en el manejo de tu presupuesto.